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La universidad de Harvard logra un fallo favorable frente a la ofensiva de Donald Trump contra la institución
Trump prohíbe la entrada de nuevos estudiantes extranjeros a Harvard
Nuevo revés para Donald Trump en su ofensiva contra Harvard. La jueza federal Allison Burroughs ha fallado este jueves que el Gobierno federal no puede aplicar la orden de prohibir la llegada de nuevos estudiantes extranjeros a la institución. El fallo de la jueza llega después de que Harvard modificara una demanda presentada el 23 de mayo contra otra orden del gobierno que pretendía impedir que Harvard matriculara a estudiantes internacionales, orden que Burroughs ya había bloqueado previamente.
La jueza, de Boston, otorgó una orden de restricción cautelar, al considerar que Harvard afrontaría un “daño inmediato e irreparable” si el decreto de Trump entraba en vigor, y. fijó la vista para el 16 de junio.
El presidente de Harvard, Alan Garber, había instado a la jueza a actuar con rapidez. “Mientras el tribunal considera nuestra solicitud, se están desarrollando planes de contingencia para garantizar que los estudiantes e investigadores internacionales puedan continuar su trabajo en Harvard este verano y durante el próximo año académico”, dijo en un comunicado poco después de que la universidad modificara su demanda ante el tribunal federal de Boston.
Al emitir la orden el miércoles, Trump afirmó que la negativa de Harvard a proporcionar registros sobre mala conducta de estudiantes internacionales representaba un riesgo para la seguridad nacional. Su orden ejecutiva bloqueaba la entrada al país de estudiantes e investigadores extranjeros de Harvard. En mayo, la administración revocó la capacidad de la universidad para avalar sus visados.
Tricia McLaughlin, secretaria adjunta del Departamento de Seguridad Nacional, dijo que el fallo del jueves “retrasa la justicia y busca debilitar los poderes constitucionales del presidente”.
“Inscribir a estudiantes extranjeros y beneficiarse de sus matrículas más altas para engrosar sus multimillonarios fondos de dotación es un privilegio, no un derecho; eso no ha cambiado”, dijo en un comunicado. “La administración Trump está comprometida con restaurar el sentido común en nuestro sistema de visas estudiantiles, y esperamos que una corte superior nos dé la razón”.
Se trata de un paso más en el enfrentamiento de la Casa Blanca con la universidad más antigua y rica del país. El tribunal federal en Boston bloqueó la semana pasada el intento del Departamento de Seguridad Nacional de impedir la entrada de estudiantes internacionales en Harvard.
La orden de Trump invoca una base legal distinta, explica Associated Press:. Trump invocó una ley federal que otorga al presidente la autoridad para bloquear la entrada de extranjeros cuya presencia sería 'perjudicial para los intereses de Estados Unidos'. Este miércoles citó esa misma norma al anunciar la prohibición de entrada para ciudadanos de 12 países y restricciones para los de otros siete. La orden contra Harvard menciona además otras leyes, incluida una que prohíbe la entrada de extranjeros vinculados a organizaciones terroristas.
El conflicto se origina en la negativa de Harvard a acatar una serie de exigencias del Gobierno federal. La tensión se ha intensificado en los últimos días, después de que el Departamento de Seguridad Nacional afirmara que la universidad se negó a entregar documentos relacionados con conductas indebidas de estudiantes extranjeros.
“En mi opinión, representa un riesgo inaceptable para la seguridad de nuestra nación que una institución académica se niegue a proporcionar información suficiente, cuando se le solicita, sobre casos conocidos de mala conducta y criminalidad cometidos por sus estudiantes extranjeros”, afirma Trump en su orden.
Fuentes de la administración Trump han elevado la presión y buscado nuevos frentes para presionar a Harvard, recortando más de 2,600 millones de dólares en subvenciones para investigación y avanzando hacia la cancelación de todos los contratos federales con la universidad. La última amenaza se ha dirigido a los aproximadamente 7,000 estudiantes internacionales de Harvard, que representan la mitad de la matrícula en algunas de sus escuelas de posgrado.